Cada familia que pasa por el estudio deja una huella especial, pero hay algunas con las que se crea un vínculo que va mucho más allá de la fotografía. 

Eso es justo lo que me ha pasado con la familia de Carlota.Con ellos hemos vivido todos sus grandes momentos: desde las fotos de la boda, pasando por el seguimiento de su primera hija Emma, las sesiones de Navidad, y ahora el precioso reportaje del primer año de Carlota. Y entre sesión y sesión, no solo hemos creado imágenes, sino también amistad… ¡Mari y yo podríamos estar hablando horas después de cada sesión! 😂

Este último trabajo con Carlota ha sido especialmente especial (sí, así de especial) porque hemos completado una sesión de seguimiento para bebés, donde retratamos la evolución de los peques desde la barriga de mamá hasta su primer cumpleaños. A través de diferentes etapas —embarazo, recién nacido, 3 meses, 6 meses, 9 meses y el primer cumpleaños— documentamos cómo crecen, cambian y se expresan de formas únicas.Cada etapa cuenta algo diferente y real. No seguimos un guion rígido: no todos los bebés se sientan a los 6 meses o gatean a los 9, y eso está bien. Lo importante es capturar su esencia, sus gestos, su mirada, su manera de descubrir el mundo.

Si algo me encanta de las sesiones de seguimiento para bebés en Plasencia, es que me permiten crear un recuerdo completo, lleno de emociones sinceras. Fotos que no solo documentan su crecimiento, sino también el vínculo con su familia. Como fotógrafa infantil en Plasencia, no hay nada más bonito que ver cómo una historia se va tejiendo imagen a imagen.

Si estás pensando en documentar el primer año de tu peque, este tipo de sesiones son una forma preciosa de hacerlo. Porque los recuerdos del primer año del bebé no solo se guardan en la memoria, también se pueden guardar en imágenes que lo digan todo.